En los últimos años, las grandes ciudades de todo el mundo han experimentado cambios importantes. Reducir la presencia del vehículo privado y devolver espacios a los peatones en el centro de las ciudades, ha sido el objetivo de muchas actuaciones llevadas a cabo en muchas ciudades. Se ha producido un aumento espectacular en la extensión y calidad de los carriles bici construidos para impulsar el uso de la bicicleta por los ciudadanos. Sin embargo, si bien el número de usuarios de la bicicleta ha crecido notablemente, en muchas ciudades esto ha tenido un efecto no deseado: la circulación de ciclistas por las aceras, muchas veces producida por la existencia de una infraestructura ciclista incompleta e inconexa y también por una falta de conocimiento de las normas viales. Esta práctica ha reducido la calidad y la seguridad de la circulación de los peatones que han visto su espacio natural invadido. Esto es una señal de que la construcción de las nuevas infraestructuras para ciclistas debe poner su foco también en la calidad y no solo en la cantidad, además de ir acompañada en paralelo de una correcta información y educación vial de los ciudadanos, y de un sistema de señalización claro en las ciudades que indique por dónde pueden circular los ciclistas y por donde no deben hacerlo.
En ZICLA hemos desarrollado una serie de soluciones modulares, escalables y reversibles para ayudar a las ciudades a mejorar la seguridad en los carriles bici segregándolos con elementos separadores tales como los separadores de la familia Zebra® y los módulos A y B del sistema Zipper®. Asimismo, en ZICLA colaboramos con asociaciones dedicadas a formar a los ciclistas y a instruirlos en las normas y recomendaciones básicas para circular de manera segura por la ciudad con la bicicleta.
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